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jueves. 12.06.2025
TRIBUNA DE OPINIÓN

Bengalas

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A veces parece que los días dejan tan poca huella que todo ocurrió ayer, y otras da la impresión de que se arrastran con lentitud inmensa. A ello contribuye, en el caso tremendo de la política española, la sensación, que algunos logran transmitir con éxito, de que pasan constantemente cosas. El así llamado líder de la oposición, que, en un arranque de solemne originalidad, propone una moción de censura. El sistema numérico ya se nos queda corto para saber qué número hace.

La vida pública se está convirtiendo en una noche en la que se disparan todo el tiempo bengalas, fuegos artificiales que tratan de engañar con su luz y su estrépito

Entre tanto barullo, pasa completamente inadvertido el hecho, relegado a páginas interiores, de que el Gobierno tiene nada menos que una nueva vicepresidenta. Como en las fiestas infantiles, se rompe la piñata y al final caen menos caramelos de los esperados, así que no prestamos ninguna atención a la relevancia de la noticia, como no prestamos la debida atención a que el desastroso presidente Mazón nombre a un ex general, no para resolverle la papeleta que tiene sobre la mesa, tal como se ha encargado de precisar el recién nombrado, sino para una vaga reconstrucción que ocurrirá dentro de nadie sabe cuántos meses. Por cierto, el mencionado militar retirado se ha permitido el lujo de repetir que el suyo no va a ser un cargo político, y lo han jaleado un montón de políticos profesionales. Perdone, señor Gan, pero esos lujos no están en sus manos. Desde el momento en que ha aceptado usted un cargo político claro que es un político, y no uno cualquiera: uno cuya primera decisión ha sido aceptar trabajar para un inepto. Los demócratas no creemos en eso que antaño se llamaba la tecnocracia. En un cargo político solamente se toman decisiones políticas. 

La vida pública se está convirtiendo en una noche en la que se disparan todo el tiempo bengalas, fuegos artificiales que tratan de engañar con su luz y su estrépito y de hacer que cambiemos la atención de sitio. Pónganse tapones en los oídos y gafas de sol, y verán cuánta gente anda desnuda por el mundo mientras nos vende trajes de colores. O uniformes. O barro. 

Bengalas