
La lengua castellana es un idioma vivo y, comonopodiaserdeotramanera, se nutre constantemente de nuevas palabras. Una de ellas es, precisamente, "comonopodiaserdeotramanera". PolĆticos, tertulianos y politólogos, sobre todo, la usamos constantemente, aunque su uso ha ido evolucionando. Dada su extensión, al principio, su pronunciación comprendĆa alguna pausa entre varias de sus sĆlabas, pero, con su constante utilización, hemos ido aprendiendo a hacerlo sin pausas, de corrido. Ya pasó antes con algunas otras palabras como "esternocleidomastoideo" o "supercalifragilisticoespialidoso" y, ahora, estĆ” pasando con "comonopodiaserdeotramanera".
Se aplica a conceptos de significado supuestamente unĆvoco, de esos que no pueden ser de otra manera, como los calificativos epĆtetos, es decir, aquellos que definen una cualidad propia del sustantivo al que acompaƱan. Por ejemplo, el calificativo "blanca" que acompaƱa al sustantivo "nieve" al hablar de la "blanca nieve". Lo mismo se podrĆa decir cuando hablamos de, por ejemplo, "servidor pĆŗblico" en el que, cualquiera de las dos palabras podrĆa hacer de sustantivo o de epĆteto ya que, sabemos que todos los servidores pĆŗblicos son pĆŗblicos y, ademĆ”s, sirven, comonopodiaserdeotramanera.
En tiempos de pensamiento Ćŗnico, el uso de esta palabra se ha extendido mucho ya que, si quedamos en que el pensamiento no tiene opciones distintas, cualquier cosa que se refiera a un concepto determinado, deberĆ” ser del tipo "comonopodiaserdeotramanera".
En tiempos de pensamiento Ćŗnico, el uso de esta palabra se ha extendido mucho
En poesĆa es muy Ćŗtil ya que rima, en forma asonante o consonante, con multitud de palabras como biósfera, hoguera, madriguera, quimera, espera, bandera, esfera, barrera, carrera, ojera, atmósfera, primavera, frontera, madera, borrachera, cartera, etcĆ©tera y, todos los femeninos de mĆŗltiples oficios.
No conviene usarla en caso de un oxĆmoron ya que, por motivos obvios, al usar dos tĆ©rminos contradictorios u opuestos, es mĆ”s difĆcil llegar a convencer a alguien de que un concepto determinado no solo tiene un significado Ćŗnico sino un opuesto, tambiĆ©n, Ćŗnico. Aunque, una vez que se desciende por la pendiente del "comonopodiaserdeotramanera", cualquier cosa es posible. Incluso se puede justificar como una licencia literaria, terreno donde todo estĆ” permitido, como en Las Vegas.
Como en el caso de āsupercalifragilisticoespialidosoā, al decirlo suena a talentoso y, eso, hace, que se abuse de decir "comonopodiaserdeotramanera" para aparentar una cantidad y calidad neuronal superior a la de la dotación propia. El problema es para el sufrido oyente de una repetición constante de esa palabra, que puede acabar hasta las narices de escucharla persistentemente. Porque, ademĆ”s, se suele utilizar no para hablar de algo a futuro, como si fuera un pronóstico, sino para explicar lo que ha ocurrido en el pasado, en forma de "yalodecĆayo", pero mĆ”s supuestamente elegante y culto.
El problema es para el sufrido oyente de una repetición constante de esa palabra, que puede acabar hasta las narices de escucharla
Desconocemos, yo al menos, el nombre de quien uso este tĆ©rmino por primera vez y, este desconocimiento, se trata de una injusticia histórica ya que la humanidad no puede poner su nombre al lado de los de Miguel de Cervantes o de Antonio de Nebrija en la galerĆa de personas que han limpiado, fijado y dado esplendor a nuestra lengua. Si aĆŗn vive, deberĆa considerar un homenaje constante el oĆr permanentemente esa palabra en boca de multitud de seguidores. Ello le podrĆ” compensar, al menos parcialmente, de haberse perdido una fortuna en royalties si la hubiera registrado como marca. Y de que, el diccionario no la haya, todavĆa, incorporado hasta que, segĆŗn tienen por costumbre en la Academia, āasienteā en el idioma.
Pero, si no estĆ” en esa galerĆa de hombres ilustres (y desde hace poco, tambiĆ©n mujeres ilustres), al menos podrĆ” estar en la de personas desconocidas junto a otras, autoras de cosas como ātipo...ā, āen planā¦ā, ālo siguienteā, āpara nadaā, o cosas asĆ. La tumba del soldado desconocido suele ser un justo homenaje colectivo a tanto caĆdo por una causa tan noble como el lenguaje, como es el caso de la patria.
El Ćŗnico problema de esta palabra, debido a su longitud, es su uso en WhatsApp, aunque esto puede tener solución sustituyendo el tĆ©rmino por la apócope correspondiente que podrĆa ser, por ejemplo, "comonopo" o un anagrama como "conopodima". Incluso, si cualquiera de estas formas hiciera fortuna, podrĆa saltar del formato WhatsApp al lenguaje coloquial y sustituir la palabra original por otra mĆ”s asequible lingüĆsticamente. Con la ventaja adicional de que, al haber un ahorro de tiempo en la expresión oral, se pueden decir mĆ”s cosas por minuto.
Y, cualquiera se podrĆa preguntar, ĀæY quĆ© hace Ć©ste hablando de lingüĆstica en tiempos preelectorales, en lugar de hablar de antisanchismo o de Irene Montero? Pues, precisamente, en tiempos en que, quien mĆ”s quien menos, no va a dejar de decir mĆ”s de una vez, y seguramente, mĆ”s de cien, lo de "comonopodiaserdeotramanera", he querido poner un poco de ilustración para el conocimiento de tan extendida como estĆŗpida expresión.
Porque todo se puede hacer de mÔs de una manera. De hecho, el cambio es la única cosa inmutable. No lo digo yo, sino Schopenhauer. Hasta la estupidez puede adoptar mil y una formas.
