
@caval100 | Se ha producido una verdadera revolución en Ucrania, desde el centro de Kiev. Los disturbios se han convertido en verdadera guerra callejera, por el empleo de armas de fuego, desde todos los bandos. 77 muertos, decenas de heridos, incontables daƱos materiales y la caĆda de un gobierno. Tras la tragedia civil, el golpe de estado con apariencia de acuerdos polĆticos. Analicemos la situación, que no estĆ” nada clara.
PodrĆamos decir que todo empezó cuando en noviembre del pasado aƱo, el presidente ucraniano, VĆktor Yanukóvich, decidió abandonar las negociaciones que se mantenĆan con la Unión Europea para firmar un Acuerdo de Asociación, por entender que no era ventajoso para Ucrania. Muchos habrĆ”n olvidado que esa era una de las raĆces del conflicto. Pero la cosa viene de lejos; desde la disolución de la Unión SoviĆ©tica o incluso desde la formación de la URSS, por el papel jugado por Ucrania. Pero los Ćŗltimos disturbios, surgen el 16 de enero, cuando el gobierno puso en marcha las leyes Ā«antiprotestaĀ» y la autorización de usar armas de combate, contra los manifestantes.
Entre los que protestan hay muchos militantes de ultraderecha y gente que estĆ”n cansados de la corrupción y de la falta de oportunidades, que desconfĆan de todos los partidos, por considerarlos parte de la oligarquĆa corrupta de un paĆs que no les ofrece oportunidades y por ello se juegan la vida, dice en una de sus crónicas Alberto Sicilia para PĆŗblico. Y como el miedo cuida la viƱa, los moderados dejan el sitio a los extremistas, que forman parte de las milicias filofascistas de ultraderecha.
Los partidos polĆticos de la oposición estĆ”n representados en un heterogĆ©neo abanico: Bloque de Yulia Timoschenko, la Ā«Juana de ArcoĀ» de la Revolución Naranja, en prisión desde 2011, condenada por abuso de poder cuando era jefa del gobierno; Unión de Todos los Ucranianos, Patria, centro-derecha; la conservadora Alianza DemocrĆ”tica para la Reforma, que lidera el ex-boxeador Vitali Klitschko; Unión Pan-Ucrania, Svoboda, de extrema derecha; y el Partido Comunista de Ucrania. En el poder, VĆktor Yanukóvich, del Partido de las Regiones, pro-ruso, que poco apoyo tiene en la calle.
Las causas del conflicto son varias y superpuestas, las reivindicaciones tan diversas como grupos de presión existen y los objetivos del gobierno, cercados por el vĆ©rtigo de los acontecimientos. Conflicto nacional entre gobierno y oposición por controlar el paĆs. Conflicto de intereses entre Rusia y UE. Conflicto social, por el hastĆo de la ciudadanĆa hacia su gobierno, los polĆticos en general y la corrupción. Es un conflicto civil entre grupos de ultraderecha nacionalista y la población rusa. Lo que comenzó por la relación entre Ucrania y la UE, se ha convertido en un movimiento contra el gobierno de Yanukóvich, que en las elecciones presidenciales de 2009, obtuvo el 52% de los votos.
Es un paĆs con dos identidades culturales, dividido entre quienes se sienten orgullosos del pasado soviĆ©tico y quieren mantener lazos mĆ”s estrechos con Rusia, y los nacionalistas que quieren olvidar los tiempos soviĆ©ticos y acercarse a Europa. Precisamente la aproximación de Ucrania hacia Europa, va contra los intereses de Rusia, que pretende preservar su natural zona de influencia en sus fronteras.
Ucrania afronta un futuro incierto. Como suele ocurrir en estos conflictos, quienes ostentan el poder económico, barren para su beneficio. En esta ocasión, empresarios de la oposición, que controlan los mĆ”s importantes medios de comunicación, han estado jaleando las protestas contra Yanukóvich. Por su parte, Estados Unidos y UE, apoyando a los opositores de dudosa credibilidad democrĆ”tica, corren el riesgo de desestabilizar la región, abriendo un nuevo periodo de Ā«guerra frĆaĀ» con Rusia. Acusando al gobierno de violar derechos humanos y actuar de manera represiva y violenta, muestran su cinismo, al no hacer lo mismo ante hechos similares cometidos en otros paĆses.
ParecĆa que las aguas empezaban a bajar mansas, cuando se firmó un acuerdo para frenar la violencia: convocatoria de elecciones para el 25 de mayo y formación de un gobierno de transición. La Rada Suprema, aprobó la restitución de la Constitución de 2004, que restringe los poderes presidenciales en favor del legislativo. Es un primer paso para lograr una solución polĆtica dialogada y Ā«una oportunidad para la pazĀ» dice el ministro de Exteriores polaco (EFE). El Parlamento tambiĆ©n ha aprobado, con el apoyo del Partido de las Regiones, una amnistĆa para aquellos manifestantes que hayan sido detenidos o sobre los que pese orden de arresto (Reuters). VorĆ”gine de acontecimientos.
La Rada Suprema de Ucrania ha aprobado a su vez una ley de reforma del código penal que ha peritido poner en libertad a Yulia Timoshenko. Los acuerdos del Parlamento ucraniano, incluyen la prohibición expresa de la operación antiterrorista anunciada por los servicios de seguridad y dirigida contra manifestantes radicales que han tomado decenas de istraciones y edificios oficiales en los Ćŗltimos dos dĆas.
Las cosas estĆ”n asĆ: Yanukóvich abandona Kiev, denuncia un golpe de estado y no dimite; el Parlamento le retira la condición de presidente, en un Ā«impeachmentĀ» de dudosa legalidad; la policĆa se retira de las calles; Timoshenko, liberada por el Parlamento, serĆ” candidata a la presidencia y dice a los concentrados en la MaidĆ”n Ā«No tenĆ©is derecho a iros hasta que haya un cambio realĀ». Barroso, presidente de la Comisión Europea, le da la bienvenida a la Ucrania democrĆ”tica. Veremos que postura adopta Rusia, que habĆa ganado la batalla geoestratĆ©gica y era valedora polĆtica y económica del presidente. Mientras, EEUU celebra la caĆda de Yanukóvich y Londres y BerlĆn, cierran filas con el nuevo poder. El pueblo en la calle no se fĆa de nadie. En fin.
Con el nombramiento de Turchinov, nĆŗmero dos Timoshenko, como presidente, continĆŗa el vacĆo de poder. de las Ā«fuerzas de autodefensaĀ» custodian el Parlamento, encapuchados, provistos con bates de bĆ©isbol y otras armas. No se sabe que serĆ” mejor, si el gobierno llamado totalitario que se va o la oposición reaccionaria que se queda. Que ha sido un golpe de estado por la derecha estĆ” fuera de toda duda y que quienes lo han consentido, cuando no fomentado, son EEUU y la UE tampoco; como tampoco hay duda de que quien ha capitalizado las protestas son la extrema derecha.
Muchos muertos en pocos dĆas y una solución en pocas horas, no parece que sea un buen remedio que cure el mal. Es como el medicamento que tiene contraindicaciones y puede causar reacciones peligrosas o indeseables. Cuando esto escribo todo estĆ” abierto. El tiempo va a decir si las medidas traerĆ”n la paz; pero el fantasma de la guerra civil, estĆ” mĆ”s a la vista que nunca. El futuro de Ucrania estĆ” en juego.