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jueves. 29.05.2025
DOCUMENTAL

Lo que estaba "Al margen” se puso en el centro

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Patricia Suárez  | 

El director madrileño, Eduardo Casanova (Madrid 1991, actor y director, conocido por películas como Pieles o La Piedad), presentó su nuevo proyecto “Al margen” en la cineteca del centro cultural Matadero que acoge estos días la XII edición del Festival Rizoma. 

En las palabras previas ante el público, el director, hizo referencia al privilegio que supone poder acudir un martes por la noche a ver una premier al cine. Posicionando ya al espectador dentro de unos márgenes sociales en los que en la mayoría de las ocasiones, solo somos conscientes de pertenecer cuando tenemos una realidad muy distinta delante. 

Con esta premisa y avisando de los nervios que sentía al ser la primera vez que se proyectaría el documental frente público, Eduardo se acomodaba en su butaca, no sin antes ir abrazando a compañeros y amigos que quisieron compartir esa gran noche con él.  

Durante la cinta, Eduardo nos cuenta la historia Moisés, un hombre diagnosticado de esquizofrenia paranoide que en 2010 se quemó a lo bonzo en las inmediaciones de Plaza Castilla.  

La obra impacta, desde el minuto uno, el silencio se sienta con el público y se puede ir notando cómo aumenta la tensión y la incomodidad que acompaña al documental. Una historia dura, en la que el director decide no quedarse en el “buenismo” pretendiendo contar una realidad que produzca lástima en el espectador, al contrario, prefiere arriesgarse a mostrar la crudeza de la realidad social que enfrenta el personaje y su entorno. Una realidad marcada también por el maltrato que hace al espectador entrar en contradicción varias veces con el personaje, sentimiento compartido con el director que dijo “haber entrado en conflicto” varias veces consigo mismo a la hora de rodar la cinta. 

Sin embargo, con ella nos muestra al humano detrás de la historia, una persona con aristas más allá de su enfermedad y agravadas por la misma. Una enfermedad que hace mella en su vida social y familiar mucho más si cabe que en su propio cuerpo, el cual muestra el impacto de un sistema que mantiene en el margen a personas como Moisés

Eduardo Casanova cuenta que le conoció por la calle y quedó fascinado con su historia, por lo que, realizando un trabajo de investigación y seguimiento que ha durado 6 años, el director decide contar esta historia sin artificios, pero dejando su sello personal, con imágenes y sonidos cargados de simbolismo que recuerdan a otras de sus obras y que ya se han hecho parte del blackground del director, mientras que se deja experimentar con nuevos planos y formas de rodar que no se había permitido antes por, como él dijo, ser demasiado heterosexuales.  

Con ello, el director se permite retarse de una forma diferente y descubrirnos otra parte de su talento, que va evolucionando sin perder su esencia, a la vez que nos arroja una realidad que no queremos ver, que resulta demasiado incómoda porque nos sacude como parte privilegiada de esta sociedad, sacando de los márgenes y poniéndonos en el centro una cinta que no permite quitar la mirada de la pantalla, el director consigue lo que pretendía al iniciar su filmación. 

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El documental que inauguraba el Festival Internacional de Cine & Cultura Entrelazada Rizoma en su edición Ouroboros, fue desatando reacciones diversas entre el público que no dejaron indiferente a nadie, ni siquiera al propio director, que comentaba posteriormente no haber entendido por qué se escucharon risas en diferentes momentos de la proyección. 

Difícil de asimilar esta reacción del público ante una realidad tan dura, la única explicación posible es el famoso dicho “te ríes de los nervios”, una seña de que el director ha conseguido impactar al público con su trabajo haciendo que sus propios cuerpos necesiten sacudir la tensión de haber visto en la gran pantalla una realidad tan injusta como dolorosa.  

Recordando así la importancia de la salud mental y el a la misma, Eduardo Casanova cerraba su discurso en el coloquio que se produjo posterior a la proyección de su documental, el cual ya se ha convertido en una obra maestra de reivindicación social sobre el impacto del abandono institucional frente a la salud mental, el sinhogarismo y otras consecuencias derivadas de la falta de actuación y la escasa inversión de recursos públicos. 

Lo que estaba "Al margen” se puso en el centro